ULTRARESISTENCIA, ¿DEPORTE QUE NO ES DEPORTE?

   De un tiempo a esta parte hay un pensamiento que yo cada vez tengo más claro y que quiero compartir con todos vostros y es el siguiente:

   "Deportes como ciclismo (grandes vueltas), triatlon (ironman) o Travesias apocalípticas y dantescas por montañas y desiertos, ¿son realmente pruebas de los límites del ser humano o son pruebas que al traspasar los límites del ser humano obligan a este a prácticas deshonestas?."

   He sido y soy un amante del ciclismo, hasta el punto de haber vivido en directo algún que otro Tour de Francia en los Alpes y recuerdo mi felicidad, hace ya tiempo, asociada a mi desconocimiento e inocencia. Yo veía a esos hombres como gigantes, bestias que podían con todo llenas de esfuerzo y sacrificio...hasta que... el castillo de naipes se desmoronó...

   Y desde entonces solo hemos ido recibiendo noticias sobre las "sustancias ilegales" que aumentan el rendimiento y también te vas dando cuenta que en parte del deporte amateur también es así (amigos que compiten y conocen) y que en gran parte del triatlon tambien...y otras disciplinas...y claro mi duda es que:  "esos deportes se pueden seguir practicando pero no con esa intensidad ni a esos ritmos...eso no es real, no es humano y no tiene nada que ver con los límites del cuerpo."

   Porque subir 5 puertos de montaña, 3 de 1ª categoría y 2 especiales con 220 km y al día siguiente algo similar o hacer un ironman en menos de 8 horas o una Titan Desert al ritmo que algunos la hacen pues quizá me equivoque pero NO LO VEO CLARO lo siento.

   ¿Donde está el límite y quien lo pone?. El ser humano en su afan por superarse creo que ha seguido un camino erróneo y ese camino es el que en ocasiones distorsiona la visión que uno tiene del deporte y lo que este debe suponer. Y que no se me entienda mal, estoy a favor del máximo esfuerzo y sacrificio pero todo desde un punto de vista natural.

   Me entristece no poder "creerme" según que marcas y dudar ya antes de ver nada, a eso hemos llegado...porque no hay que ser un erudito en deporte para tener una idea de que algunos límites alcanzados son irreales y eso no quita mérito al deportista que entrena y se sacrifica día tras día, le quita dignidad, imagen y respeto al deporte que practica.

   El deporte deja de serlo cuando alguien decide poner en riesgo su vida para alcanzar lo que por si solo jamás podría, a partir de ese momento ya no se puede hablar de deporte y lo que debería dolernos de verdad es que ya ni tiene que ver con ganar más dinero ni ser más mediático (sigue sin ser justificable) sino con la sensación propia e individual de creer (porque no es real) de que se están superando unos límites individuales "ficticios".

   Si, ya se que esto no solo no cambiará (lo veo complicado) sino que cada vez va a peor, pero habrá que pensar que como todos tienen prácticamente acceso a lo mismo pues al final seguirá ganando el mejor, ¡no?


   Saludos,


           Franky Kings