domingo, 27 de febrero de 2011

DE AQUÍ EN ADELANTE


Es fácil pensar en ti mismo como en la persona que has sido. Sin embargo, verte a ti mismo como la persona en la que podrías convertirte sería mucho más productivo.

Siempre estamos buscando excusas para no “evolucionar”, para realmente convencernos a nosotros mismos de que tal y como estamos ya nos va bien, pero esto en la mayoría de los casos no es del todo cierto

Podría parecer como si los errores y decepciones del pasado tuviesen una presencia demasiado importante en nuestra vida. En este preciso instante, sin embargo, puedes decidir dejarlos totalmente de lado.

Cuando hablamos de un plano físico, sucede lo mismo. De verdad que no importa lo que hayas hecho o dejado de hacer a partir de hoy. Realmente tú y solo tú vas a decidir que es hora de cambiar y así va a suceder.

Debes pensar que de aquí en adelante, tu vida depende de ti. En todos y cada uno de los instantes por venir serás libre de elegir tus pensamientos, tus sentimientos, tus acciones y tu actitud.

Considera las posibilidades. Piensa en lo que podría suceder si las limitaciones que pensabas que estaban allí, en realidad no existiesen en absoluto. Un mundo absolutamente nuevo se está abriendo ante tus ojos.

Busca bien dentro de ti y conecta tus pensamientos con las cosas que realmente importan. Luego imagínate reflejando esos preciados valores a través de la manera en que vivas cada instante.

Comenzando ahora, puedes conseguir absolutamente todo lo que te propongas pues nadie puede decidir por ti y, entonces, ¿a qué estás esperando?

Saludos,

Kings.

viernes, 11 de febrero de 2011

DETALLES

Detalles son los que marcan la diferencia en gran parte de nuestro día a día no solo en aspectos deportivos y de entrenamiento, sino en cualquier ámbito.
Pero lo que aquí nos importa es la preparación física y el entrenamiento y por ello quiero hablar de esas pequeñas sutilezas que suelen pasarse por alto...

Porque nuestro trabajo ya de por si y según a quien vaya dirigido pues no resulta de lo más agradable ya que requiere de un coste, un esfuerzo, una motivación extra.

A mi particularmente se me hace todo más complicado cuando esos detalles no se cuidan...sea cual sea el nivel del cliente/jugador/atleta/equipo/... que estés entrenando:

1.- Llegar a la hora que se empieza. No digo ya el llegar tarde que me parece incomprensible pero empezar a las 5 y llegar a las 4:59 es igual de poco profesional. Tú tienes una hora de entreno y pierdes los 10 primeros minutos hablando, calentando,...cuando podrías llegar 10 minutos antes y ya estar preparado para empezar a tope. Una lástima.

2.- El agua o el correspondiente líquido. Llegar sin él, llegar con la mitad, tener que ir en medio de la sesión a buscar más,...hay que preveer lo que necesitaremos y tenerlo antes de empezar la sesión. Ir sumando el tiempo perdido en todo lo que voy explicando y al final vuestra sesión de una hora (bien que la pagáis) se queda en apenas 30 minutos.

3.- Calzado y ropa adecuada. Si, si, lo se, es un clásico pero aún así no sabéis la de veces que hago un entreno combinando exterior e interior lo que supone diferente calzado y ropa y cuantas veces la persona es cuestión (habiendo sido avisada) no trae la equipación adecuada.

4.- Las explicaciones. En este caso trabajar con adultos y con niños dista bastante pero en ocasiones las explicaciones (en las que intento ser muy claro) deben ser repetidas innumerables veces y eso sigue siendo tiempo perdido. La falta de motivación, concentración,...lastran la atención del cliente.

5.- Repetición de un ejercicio "mal hecho". Yo suelo decir que en la mayoría de casos los ejercicios mal hechos no existen, sino infinitas variantes de la explicación que yo di. Lo que si está claro es que si yo dije que había que dar la vuelta a un cono, quiero decir exactamente eso y no que podías pasar por encima. Puede parecer algo insignificante pero no os imagináis la de veces que se repite a lo largo de una sesión con las correspondientes correcciones.

Bueno tampoco quiero hacerme pesado ni parecer un "triquismiquis" con cosas que a priori pueden parecer banales pero yo os invito a que hagáis unos números muy sencillos:

Haces 2 veces por semana entrenamiento personal con tu Coach de una hora cada sesión y pagas por cada una de ellas 40 euros. tenemos 80 € / semana y 320 € /mes aproximadamante por 8 horas de entreno.

Ahora, con todo lo que he comentado anteriormente pon que de esos 60 minutos que tiene la sesión, trabajas de verdad 40 porque los otros 20 "los desperdicias". Te queda que de esas 8 horas, pierdes la friolera de 2 horas 40 minutos en detalles varios y sigues entrenando 5 horas 20 minutos por las que sigues pagando 320 euros con lo que pasas de pagar 40 €/h a pagar casi 65 €/h.

No es que quiera jugar en mi contra porque yo soy un profesional de la preparación física y no me gusta engañar a nadie pero lo que tampoco me gusta es que, en ocasiones, se quiera engañar al profesional pidiendo unos resultados que viendo lo que se ha trabajado resultan poco más que utópicos.

Es para que todos reflexionemos...

Saludos,

Kings.

domingo, 6 de febrero de 2011

SERIES Y REPETICIONES

Este es un artículo dedicado a todos aquellos que creen en las matemáticas exactas a la hora de realizar cualquier actividad física.

Bien es cierto que hay estudios y argumentos probados científicamente para poder corroborar que un determinado número de series y/o repeticiones de un ejercicio produce un efecto concreto en el músculo y/o el sistema cardiovascular pero yo pregunto, ¿y el individuo, no cuenta?

Yo mismo encuentro que tengo días donde una determinada carga de trabajo (la que me toca en mi programa) se me hace corta, fácil. Pero me encuentro con otros donde esa misma carga soy incapaz de terminarla.

Cada uno que hace los entrenamientos para sí mismo es libre de buscar sus propios límites pero si tienes clientes como porfesional de la preparación física, buscas con ellos unos objetivos y de alguna manera te debes a ellos, hay que tener la facultad de controlar cargas y flexibilizar los entrenos.

No quiero con ello decir que siempre a la mínima haya que estar reduciendo las series, pero si que no seamos 100% víctimas o esclavos de un programa porque tan importante va a ser ese programa como la habilidad de comprender y entender el estado de la persona.

Yo os puedo asegurar que en ocasiones he tenido que destrozar el programa planteado porque realmente he sentido que el cliente directamente me iba a mandar a paseo. No hay que tomárselo como un fracaso u ofensa, más bien creo que son oportunidades para realmente conocer nuestra capacidad de adaptación y de seguridad en el trabajo que realizamos.

En el 75-80% de las ocasiones hay un trabajo previo, un programa a seguir con objetivos y contenidos claros. Pero ¿qué pasa con el otro 20%?.

Yo os puedo asegurar que, en ocasiones, el cliente valorará más que seas capaces de "reconocer" su estado personal y emocional que no la decisión de realizar 2 series en vez de 3 o 10 repeticiones en vez de 12. En la mayoría de ocasiones ese tipo de detalles y conocimientos solo tú los conoces y puede no tener el valor que tu le das en las personas que no dominan el ámbito del entrenamiento deportivo.

La conclusión es que sea cual sea vuestra forma de trabajar, nunca hagais de vuestro programa el "santa-santorum" que hay que seguir a toda costa porque las personas somos un conjunto de sensaciones, emociones que deben ser tenidas en cuenta en todo momento. Ser capaces de reconocer esto puede ser la diferencia entre tener un cliente fidelizado o que nos dure 1 mes.

Saludos,

Kings